Hoy quiero hablar de algo que para muchos resultará algo polémico, y es si el alcoholismo es una enfermedad o no. Hay mucho debate de si es realmente una enfermedad o una condición médica que se ha inflingido la propia persona. Los que se dedican a atender y “curar” a las personas con problemas de alcoholismo están convencidos de que es una enfermedad. Otros piensan que es algo más relacionado con el los efectos psicológicos de una adicción, pero que no entra en la categoría de enfermedades.
Lo cierto es que los médicos prescriben medicamentos en muchos casos de alcoholismo, aunque realmente sean para los efectos que produce. Hablo de insomnio, nauseas, malestar general y otras cosas asociadas al alcohol y su consumo. ¿Pero es el alcoholismo es una enfermedad en si misma? Voy a ser sincero y mucha gente no coincidirá conmigo, y eso que he sido alcohólicos durante décadas. Se de lo que hablo y lo que es esta adicción.
¿Es el alcoholismo es una enfermedad?


En mi opinión no lo es en absoluto. Voy a intentar explicarlo de una forma clara y con la mayor lógica posible, aunque aun así muchos no quedarán convencidos. Tengo muy claro lo que es una enfermedad y las causas que llevan a pasar por un trance tan desagradable. Para verlo desde una perspectiva cercana, voy a poner el ejemplo de otras drogas, empezando por otras de las socialmente aceptadas que es el tabaco.
Son los fumadores enfermos porque fumen una o dos cajetillas de tabaco al día. Se que existe el término tabaquismo, el cual puede sonar a enfermedad, pero solo se refiere a una adicción. Una persona que fuma mucho sabe que está enganchado a esa sustancia y lo sigue haciendo, aunque sabe que está poniendo en peligro su salud. El tabaquismo es una adicción y puede ocasionar enfermedades, de la misma manera que lo hace el alcohol.
Cuando hablamos de ser adicto al tabaco, pienso en personas que lo usan durante un largo periodo de tiempo. Si no lo deja y sigue fumando, pueden aparecer enfermedades como el cáncer de pulmón, de laringe, etc. Eso si son enfermedades que se pueden achacar al tabaco en algunos casos, pero hasta que aparecieron el tabaco no era la enfermedad. Cuando hablamos de abuso de alcohol, pueden aparecer enfermedades como la cirrosis, pancreatitis, y algunos tipos de cáncer. Pero eso no significa que el alcoholismo que las ha provocado sea también una enfermedad.
Al igual que cualquier adicción, el alcoholismo produce un cambio en la forma de pensar, actuar y comportarse por los cambios químicos que produce la droga. Dependiendo del grado se desarrollan comportamientos obsesivos alrededor de la adicción. Para la personas afectada todo le parecerá normal hasta cierto punto, donde los justifica todo negando que tenga un problema. Dicho de otra manera, no piensa que tenga una enfermedad porque realmente no se siente mal.
No estoy diciendo que el alcoholismo, tabaquismo y adicción de otras drogas sea un problema relacionado con la sanidad. Como he dicho, las enfermedades que producen todas estas drogas producen un gasto inmenso en el sistema sanitario de cualquier país. Sin embargo, mientras tanto no se puede considerar a la persona enferma porque fisiológicamente todo está bien. En el momento en que el alcohol produce daños graves la cosa cambia.
Conclusión


Tengo que decir que el no considerar el alcoholismo una enfermedad son buenas noticias. ¿Por qué digo esto? Simplemente porque si eres alcohólico, crees que lo eres o lo fuiste, NO has estado enfermo nunca y que nadie te convenza de lo contrario. Eres una persona completamente sana que ha caído en la trampa de una adicción patrocinada y promocionada por la sociedad.
Hacer creer que una persona adicta es alguien enfermo creo que es contraproducente. Para empezar se baja la moral del adicto y se ve como alguien mermado por un mal que realmente no tiene. Dile a alguien que esta enfermo mil veces, y acabará sintiéndose enfermo de verdad. Si alguien ha desarrollado enfermedades debido a su adicción, hay que tratarlas como tal, pero nada más. Solucionar la adicción no se trata con medicinas, sino con sentido común y convencimiento propio.
Por supuesto, en algunos tratamientos contra el alcoholismo se usan prescripciones médicas para calmar la ansiedad y efectos del síndrome de abstinencia. Por supuesto que no me voy a meter en el terreno de los médicos en este campo, pero creo que salvo ciertos casos excepcionales, tomar drogas para quitarse de otra droga es innecesario. Por supuesto, es mi humilde opinión desde mi propia experiencia.
Si piensas que me equivoco en algo o quieres dejar tu opinión, por favor, deja un comentario y hablaremos del tema con criterio y transparencia.
Estoy totalmente de acuerdo. El alcoholismo, como toda adicción, es un trastorno de la conducta y así mismo debe ser tratado (desde lo conductual). Lo que ocurre es que un alto porcentaje de adictos cursan su trastorno con una enfermedad o condición de base como la depresión, el trastorno afectivo bipolar y otros. A esto le conocemos como Patologías Dual y obliga a que al abordaje conductual le tengamos que sumar la intervención medicamentosa. Como toda condición multifactorial, se debe analizar y actuar desde diferentes enfoques para atacar el problema en todas sus aristas.